En 1976 el artista italiano Luigi Serafini inventó un mundo poblado por seres vivos, animales y plantas, por todo tipo de criaturas diferentes.
Inventó también extraños ingenios que tenían su lugar en aquel atlas ; al mismo tiempo, el artista mostraba las arquitecturas que existían como lugares de descanso para los habitantes de aquel macrocosmos.
Por mostrarnos, hasta hizo una descripción de los perfiles de las distintas especies y tipos humanos que podían vivir allí.
Por concebir, Serafini concibió hasta el texto que acompañó a toda aquella panoplia de geniales y alucinantes imágenes, invento que aún hoy en día especialistas en la materia tratan de descifrar para poder comprender lo que el autor quiso decir con aquella suerte de enciclopedia.
De este libro que ha sido denominado raro, mágico, simbólico y enigmático hay varias ediciones: la primera de 1981 fue editada por Franco Maria Ricci en dos tomos y hoy podría llegar a pagarse hasta seis mil euros por el Codex. La última es una edición italiana revisada de 2006.
Es innegable la perplejidad y el impacto estético que produce la visión de aquel trabajo tan fantástico que fue terminado en el año 1978.
¡Qué lo disfrutéis!
Vía Odisea2008
Hola otra vez.
ResponderEliminarAnte todo, gracias por tus comentarios sobre mi tanda de rinocerontes turísticos. Coincido en que el de Travaglini es de los más bonitos, además de ser el primero que encontramos.
ME HA ENCANTADO (así, con mayúsculas) ésta entrada de Luigi Serafini. No tenía ni idea de su existencia... y desde luego, ya te he pirateado esos bellísimos rinocerontoides.
La creatividad de éste trabajo es magnífica. También muy interesante lo de Kay Sage, de quien publiqué tres o cuatro cosas hace un tiempo. Y Lola Dupré también tiene lo suyo; esas imágenes "explotadas" me evocaron a Dalí...
Como siempre, muy buen nivel.
Un saludo hirviendo desde Tenerife.
Hola Javier, siento no haberte respondido antes.
EliminarMe alegro de que te haya gustado la entrada. Es una obra muy especial que conocí hace algún tiempo gracias a uno de los blogs que guardo en el mío y había quedado ahí en mi retina. Me acordé mucho de tí cuando ví los rinocerontes de esa tierra inventada y me puse manos a la obra ;) No ví lo que tienes publicado sobre Kay Sage pero es una autora que me gusta mucho y con Lola Dupré fue flechazo a primera vista. La encontré seleccionando imágenes para la entrada sobre el Dadaísmo que es la anterior entrada. Todos los textos hablan de surrealismo en su obra sin embargo, para mí tira más hacia el Dadá sobre todo por el juego que realiza con las imágenes tan icónicas que utiliza, en algunos casos. Quizás será la distorsión de la Gioconda,no lo sé, pero a mí me suena más a Duchamp con toda la distancia pertinente. Sea como fuere su obra es interesante o eso me lo pareció a mí.
Gracias por tus comentarios como siempre Javier y bienvenido otra vez.
Bico gallego