En 2008, el director de cine Martin Provost dirigió una película protagonizada magníficamente por Yolande Moreau. La actriz encarnaba a Seraphine Louis (1864-1942), también conocida como Séraphine de Senlis, una mujer francesa que sobreviviendo a una vida de penurias, encontraría en la pintura una ayuda para su alma. La pérdida de sus padres siendo una niña hizo que tuviese que hacer todo tipo de labores para poder vivir y al mismo tiempo comenzó a pintar de manera autodidacta.
Se nutría, estéticamente, de sus paseos por los campos, la visión de los árboles y las plantas. Afirmaba que pintaba por indicación de los ángeles y de la Virgen María. (1) Nunca dejó que la viesen pintar. Lo hacía a solas, encerrada en su habitación. Decía que en una especie de trance.
Su obra será descubierta por el coleccionista y crítico Wilhelm Uhde, el mismo que había descubierto la obra de Picasso, Braque y Rousseau. Le comprará obra y hará posible que pueda exponer pero finalmente el crack de 1929 y sus consecuencias forzarán a que el marchante le deje de comprar sus pinturas.
Desgraciadamente, ella no fue capaz de administrar bien todo lo que había ganado vendiendo su obra y finalmente, su muerte tuvo lugar en un hospital psiquiátrico , en total soledad. Su cuerpo fue enterrado en una fosa común .
La obra gráfica ha sido extraída de una búsqueda general en Internet.
En cuanto a las obras de referencia hemos utilizado esta y esta otra en las que podéis leer más sobre Seraphine Louis.
Gracias por mostrar y hacer recordar la película sobre una mujer que demostró que cuando se nace con algo dentro, es emocionante que pueda salir algo tan hermoso.
ResponderEliminarTienes toda la razón. Hermosa era su pintura y hermosa era ella por llevar la semilla de una creación tan especial, dentro.
EliminarUn abrazo Shishi y gracias a ti por dejarme el comentario haciéndome saber que te ha gustado.