Gracias a mi colega bloguero Javier Fuentes, dueño de "El Hurgador", he conocido a este artista. Ya se ha hablado en otro lugar de este blog del llamado Lowbrow Art como sinónimo del Surrealismo Pop. A Travis Louie (Nueva York, 1964) se le encuadra en esta tendencia.
Su obra consiste en mostrarnos extrañas, y en ocasiones, enormes criaturas, monstruos, insectos, seres que parecen salidos de "La Parada de los Monstruos", película de culto dirigida por Tod Browning en 1932. A todos ellos, los cubre con una pátina decimonónica, y a la manera de los retratos victorianos, los presenta con monóculos, con trajes de cuello de terciopelo y chalecos, antropomorfizándolos como hiciera hace dos siglos el genial Grandville. Mientras, envara a las mujeres con corsés y faldas que barren el suelo.
Sus creaciones son ricas en referencias literarias hacia autores como Poe o Lovecraft pero también cinematográficas. Fundamentalmente del Expresionismo alemán de un Murnau o de Fritz Lang, pero también del cine negro americano de Jacques Tourneur o de Robert Siodmak, tal como él mismo afirma en su propia página que podéis consultar Aquí.
Sin utilizar colores, solamente el blanco y negro, y a través del lápiz y acrílicos, recrea ese ambiente tan especial escribiendo una historia para cada uno de sus personajes, haciéndoles vivir situaciones en mundos surrealistas y oníricos.
El sentimiento es de extrañeza pero también, y mágicamente, de ternura.
Una obra muy especial.
Toda la obra gráfica ha sido extraída de su página web ( citada más arriba) y de su Instagram, con la única intención de divulgar su trabajo. De su misma página ha sido extraído el texto para elaborar la entrada.